Beatles Bike

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sábado, 4 de abril de 2015

Ahora me ves, ahora no me ves

Anuncia Volvo una nueva pintura para que los ciclistas sean visibles por la noche:



 La reacción en las redes afines al ciclismo urbano ante esta propuesta ha sido ambivalente. Desde los "me gusta" repetidos a opiniones críticas sobre el hecho de que se vuelve a pasar la responsabilidad de los accidentes a los ciclistas: tienes que hacerte visible.

Los inconvenientes de la propuesta no son pocos:
  1. Se diluye con el agua, luego no eres visible cuando es más necesario.
  2. No sustituye a los sistemas legalmente obligatorios (las luces)
  3.  Refuerza el mensaje de la bici como vehículo peligroso (vease el inicio, el desarrollo y la conclusión del vídeo de Volvo). Mea culpa: este blog cae continuamente en ese error.
  4. No evita los accidentes por parte de los que no prestan atención (crecientes con el uso de los móviles en los coches) o de los que viendo, no respetan las velocidades y distancias de seguridad con las personas que van en bicicleta.
  5. Contribuyen a la representación del ciclista como un ser extraño ("fantasmagórico", véase el vídeo). Y todavía más extraño cuando te bajas de la bici. El notas del pub.
  6. Se vende como invisible, pero la letra pequeña indica que mancha ligeramente la ropa.
  7. Es un consumible, por lo que eleva el precio de ir en bici (además del gasto de recursos del planeta).
  8. Te puede trasmitir la idea equivocada de que los que van en coche te ven, cosa que no es cierta (pues no esperan bicis en la calzada, sino vehículos muy grandes, pesados y de movimientos lentos). De hecho, el principal consejo de seguridad ciclista que me atrevo a dar es: piensa que no te han visto, de hecho, no lo hacen.
  9. El mensaje lo lanza una marca de coches... (eso no debería importar si el mensaje es bueno ¿o sí?, por ejemplo, ¿admitiríamos que un fabricante de armas nos proponga usar chalecos antibalas?... pues los chalecos sí que han demostrado que funcionan).
  10. Recuerda a las prácticas de marcar al otro con signos externos que aplican los sistemas autoritarios (¿me estoy pasando?...).
Bike Snob y Copenhagenize lo han criticado mejor que yo, así que no insisto, pero se me ocurren mejores usos para el spray de las narices. Por ejemplo, que lo lleven los peatones para pintar los coches que no respetan los pasos de cebra, los ciclistas para pintar a los que les pasan muy cerca o usarlo en las pistas de baile para marcar a los provolones. 

Sin embargo, hay un punto en contra de mi argumentación. Tengo la teoría de que cualquier medida para las bicis sólo es asumible si resiste el siguiente test: ¿sería aplicable a los coches?.

En parte este test se cumple para esta propuesta, pues está claro que ningún propietario de coche está dispuesto a coger un spray y teñir su coche de pintura reflectante y menos su ropa y volver a hacerlo cada vez que llueve o se cambien de ropa.

También está claro que aunque se haya demostrado que los coches negros son más peligrosos, la gente no va a renunciar a tener coches negros. Además no está mal que haya coches negros. De hecho, el que los coches oficiales sean negros permite tener ciertas esperanzas de renovación de los cargos electos.

Sin embargo, la pintura reflectante puede ser interesante para los coches. Como Nissan que ha tenido la idea de emplear una pintura que absorbe los rayos ultravioletas y es más visible por la noche.




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